Raúl Pérez Peña/Listín Diario, Matutino Dominicano -
No hay PLD que dure 100 años ni pueblo que lo resista. Peor para ellos si continúan apretando la tuerca.
El panorama político del país se presenta color de hormiga, o de fiera agresiva sin perspectivas de cambios sustanciales o en términos medios. Vamos de mal en peor, con un derrotero hacia el colapso, sin que haya esperanza de impedirlo.Un sacerdote católico me comentaba que a este país no lo salva ni el médico chino. Expresaba así un sentimiento pesimista que está en boca de cientos de miles y que tiene que ver con la perversión que hunde al país como fruto de la política de tres partidos políticos que actúan como si República Dominicana fuera una finca que deben compartir con un calendario a golpe de cuatrenios.
Hay una legión que nunca ha sido derrotista ante el devenir político. Por abrumador y extenso que sea un período, siempre cede al empuje de fuerzas contrarias, o aparentemente contrarias.
Por ejemplo, de los tres partidos políticos que dominan el panorama ninguno es esencialmente contrario al otro. Son aves del mismo nido o serpientes de la misma selva. Quien cultive ilusiones pensando que la vuelta del PRD al poder aliviaría país se llevará tremendo desengaño.
He publicado que el único candidato en las próximas elecciones se llama Leonel Amable Vargas, que significa lo mismo que Miguel Aristy Fernández, o Amable Vargas Fernández. En cualquiera de sus versiones el candidato es el mismo. Para el país no representan más que señales ominosas de tiempos peores.
De ahí que no hay que abrigar temores con la desbocada y alocada carrera por la reelección de Leonel. Cierto que él fue quien dijo que la corrupción le costaba al país más de 30 mil millones.
Hoy se puede afirmar que la cifra es asombrosamente reducida, y que un rápido vistazo arroja nombres y apellidos. Sin irresponsabilidad ni indiferencia hay que aceptar el reto que lance la apuesta reeleccionista, si a quien vendan como factor de cambio, augura por el contrario un nuevo engaño.
No hay PLD que dure 100 años ni pueblo que lo resista. Peor para ellos si continúan apretando la tuerca.
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