Por Miguel Espaillat.
Para muchos dominicanos Joaquín Balaguer y Leonel Fernández son dos genios, es decir, lo máximo de lo máximo. Los alaban tanto, que en su fanatismo, ignorancia e insensatez, caen en el ridículo, en el asco, y el oprobio en sus ponderaciones, al soslayar que ambos personajes no se han distinguido como aportadores sociales de ideas ni doctrinas innovadoras, ni de conductas honradas y patriotas, que vengan a beneficiar a la humanidad o a la comunidad étnica a la que pertenecen, para ser merecedores de esa condición genial y de padre de la patria, como erróneamente se les atribuye, al primero. En su desconocimiento no se dan cuenta que al contrario ambos líderes políticos, en su tiempo, se han erigido en obstáculos para el desarrollo espiritual y material del país, tan mal administrados por ellos.
Los acreedores de estas virtuosidades, parten de la habilidad que ambos tienen para lograr sus metas a través del postulado que establece que “el fin justifica los medios”, en la que ambos son maestros. Balaguer no escatimó ningún sucio recurso, incluyendo la mentira y el crimen de sangre, su favorito, para permanecer en el poder, y a Fernández para reelegirse, no le hace roncha la corrupción rampante que escenifica su gobierno para imponerse, ni le regurgita declararse Balaguerista y Vinchista, sin importarle ofender la memoria de su maestro y mentor, profesor Juan Bosch, ni a los tantos mártires que cayeron asesinados, defendiendo la patria tiranizada por aquellos oscuros personajes, que tienen mas culpa que nadie junto a él, del desastre económico y la podredumbre moral, en que hoy esta sumida la republica.
Para aquellos que tienen a Balaguer y a Fernández como genios, les transcribo algunos datos de la biografía de un gran filipino, para que reflexionen sobre lo que es una verdadera inteligencia positiva. José Rizal (nacido el 19 de julio de 1861 en la ciudad de Calamba, Laguna), "orgullo de la raza malaya" y héroe nacional, dominaba 22 idiomas: árabe, catalán, chino, inglés, francés, alemán, griego, hebreo, italiano, japonés, latín, malayo, portugués, ruso, sánscrito, español y tagalo, además de algunas lenguas nativas; fue arquitecto, artista, hombre de negocios, caricaturista, educador, economista, etnologista, científico agrónomo, historiador, inventor, periodista, lingüista, músico, mitologista, nacionalista, naturalista, novelista, cirujano oftalmólogo, poeta, propagandista, psicólogo, científico, escultor, sociologista y teólogo (htt://es.wikipedia.org.wiki/Filipinas).
Compárese este hombre con aquellos y otros hombres que con sus epopeyas hicieron cambiar el rumbo de sus pueblos y de la humanidad. Bastaría mencionar a: Julio Cesar, Ho Chi Minh, Mao TSE Tum, Lenin, Marx, el General Giap, Ganhdi, Lincoln, D’ Gaulle, Bonaparte, Montesquieu, Bolivar, Marti, Fidel Castro y miles mas. Al lado de estos prohombres, Balaguer y Fernández, sin lugar a dudas, son dos chivos harto de jobo, cuyas influencias no traspasarán los límites de las aldeas, que ellos envilecen. En el país de los ciegos, un tuerto es un rey. Por demás, como dijo Bolivar, todo talento sin probidad, es un azote. Acepto lo de genio, pero en la categoría, de genios del mal.
miércoles, abril 09, 2008
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