Hace tiempo el presidente venezolano Hugo Chávez vaticinó un petróleo por encima de los US$100, y nuestras autoridades no tomaron ninguna medida
Por Daniel García Archibald / El Caribe
Por un asunto de espacio, el artículo de la semana pasada ( Después de las elecciones, qué? ) debió ser recortado e impidió dar a conocer mi punto de vista sobre la situación económica en que quedará la economía dominicana tras el proceso electoral.
Y es que los dominicanos no nos damos cuenta de hacia donde está llevando el actual gobierno al país en procura de lograr sus objetivos reeleccionistas.
Se está llevando todo por delante no importa en cuales condiciones quedemos.
Hace mucho tiempo el presidente venezolano Hugo Chávez vaticinó un petróleo por encima de los 100 dólares, y nuestras autoridades no tomaron ninguna medida preventiva.
Desde hace meses estamos observando las dificultades de la economía de Estados Unidos, de la cual dependemos en gran medida, pero el gobierno ha seguido como si eso no nos afectará.
Los organismos internacionales han venido anunciando escasez y carestías en artículos alimenticios a nivel mundial, sin embargo nuestro gobierno no ha hecho caso a esa situación.
De nada han valido las advertencias y recomendaciones de técnicos del propio gobierno sobre las dificultades que se avecinan a fin de que se tomen algunas medidas.
Muy por el contrario, el presidente Leonel Fernández y su equipo reeleccionista han seguido gastando, derrochando los dineros del pueblo por pura politiquería porque su único propósito es lograr la reelección.
En momentos en que todo el mundo advierte serias dificultades para el futuro de la nación, al presidente Fernández no le importa nada más que su triunfo político.
Con ese propósito se lleva todo lo que esté a su paso, descalifica, humilla, ignora, avasalla y se autodefine como el único capaz de gobernar este país y de tener capacidad para conceptualizar sobre los problemas de la nación.
Mientras los expertos de todas las corrientes dicen que nos esperan tiempos duros, de protestas, reclamos, paros, huelgas, e incluso situaciones como la que hoy se vive en Haití, el presidente Fernández sigue como si nada.
No hay que ser experto para darse cuenta que, gane quien gane las elecciones, gobernar el país en los próximos cuatro años será difícil.
Y si quien gana resulta ser la reelección, las cosas pintan peor.
Por tanto, vale aconsejar al presidente que conserve sus dotes de superinteligente, como él se autodefine, pués las necesitará para lograr la gobernabilidad, si finalmente la reelección se impone.
Daniel Garcia Archibald es periodista
darchibald@hotmail.com
sábado, abril 12, 2008
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