El glorioso PPH

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JUAN TAVERAS HERNANDEZ

-DE EL NACIONAL, VESPERTINO DOMINICANO-

Dicen que al árbol de que da frutos es al que le tiran piedras.

¿Por qué al PPH le tiran tantas piedras desde tantos ángulos?

¿Será que tiene muchos frutos?

¿Será miedo a la posibilidad de que su creador pueda resurgir de sus cenizas y volver a ser opción de poder?

El Proyecto Presidencial Hipólito llevó al Partido Revolucionario Dominicano al poder tras 14 años de oposición y sin el liderazgo casi mesiánico del doctor José Francisco Peña Gómez. El PPH logró la unidad del PRD alrededor de la figura de Hipólito Mejía, quien tras ganar las elecciones del 2000 distribuyó el poder entre sus compañeros de partido sin importarle que fueran sus adversarios internos. Hipólito Mejía fue muy generoso, pues los mayores beneficiarios de su gobierno no eran del PPH. Sólo hay que ver la lista de secretarios y subsecretarios de Estado, embajadores y cónsules. Los 300 mil y tantos empleados públicos del gobierno del PPH no fueron designados con sentido grupal.

Quienes así actuaron fueron los ministros, que eran la mayoría, se alejaron del presidente Mejía y del PPH. El gobierno del PPH fue tan tolerante que permitió que la secretaria de Educación, el secretario de Salud Pública, el del Seguro Social, el de Obras Públicas, de Turismo, entre otros, aspiraran a la Presidencia de la República.

Falta por señalar algunos funcionarios del Ministerio Público, del Congreso y de otras dependencias. Durante el tiempo que se mantuvieron en el gobierno, el PPH era bueno. Ese grupo formaba más de la mitad del gobierno, y se hizo enemigo del presidente de la República, pero ninguno renunció a su cuota de poder. Se mantuvieron en sus cargos hasta que el PPH perdió el poder y las elecciones. Actuaron como oportunistas. Como verdaderos trepadores. Y aún hoy, que el PPH no existe, continúan maldiciéndolo, haciéndole coro al gobierno y sus bocinas atacando duramente a Hipólito Mejía. La verdad es que los ingratos no tienen memoria.

Los principales enemigos del PPH y del ex presidente Mejía no están ni han estado nunca en el Partido de la Liberación Dominicana. No, han estado en el PRD. En muchos aspirantes a la Presidencia que ya quisieran ver en la cárcel al ex mandatario. Y si aún Hipólito está suelto, si el gobierno del PLD no lo ha metido en la cárcel, no ha sido por la solidaridad de sus compañeros de partido que fueron funcionarios de su gobierno, sino porque no han encontrado la manera, porque, como he dicho, Hipólito, ni mató, ni robó. Se equivocó muchas veces, es cierto, pero de buena fe.

El presidente Fernández y el PLD han encontrado en el PPH una excusa para justificar sus errores y su falta de capacidad para gobernar, sabiendo que encontrará eco en el PRD y en una parte de la "suciedad" civil.

Todo cuanto ha pasado y cuanto pasará en los próximos cien años será responsabilidad del PPH. En ningún momento Fernández se ha referido a la crisis bancaria del 2003 que involucra a determinados amigos y vecinos. Por el contrario, culpó al PPH y al ex presidente Mejía, lo cual ha sido corroborado por dirigentes malditos del PRD.

Sin embargo, el PPH encontró un país arrasado por el huracán Leonel. En agosto del 2000 cuando Hipólito llegó al Palacio Nacional no había dinero ni para cubrir la nómina del Estado. El PPH, con Hipólito Mejía a la cabeza, enfrentó la crisis con valentía. La recuperación se hizo evidente. Durante los primeros cien días se vio el dinamismo. Un balance de los primeros tres años del PPH revela una inversión sin precedentes en obras de bien social. El PPH sembró el país de obras. En materia agrícola el éxito no pudo ser mayor. El PPH redujo las importaciones de alimentos. El país no estaba bien, pero había mejorado, sobre todo tomando en cuenta que el comesolismo lo dejó en quiebra, pues hasta regaló las empresas estatales que eran patrimonio del pueblo. Todo marchaba más o menos bien hasta que vinieron los problemas nacionales e internacionales que todos conocemos. Fue el gobierno del PPH el que salvó los ahorros de 700 mil ahorristas; fue el PPH el que salvó del colapso el sistema financiero, fue el PPH con el presidente Mejía quien sometió a la Justicia a los responsables del fraude de los bancos sin importarle relaciones de amistad de muchos años; fue el PPH que mantuvo un pleito permanente con el más rancio y atrasado sector de la oligarquía y de la cúpula de la Iglesia Católica.

Nada ni nadie es tan bueno que no tenga nada malo. De igual modo, nada ni nadie es tan malo, que no tenga nada bueno. El gobierno del PPH, que era el gobierno del PRD encabezado por Hipólito Mejía, visto desde una perspectiva objetiva, no fue malo, ni perverso. De no haber sido por la crisis, Hipólito Mejía aun fuera presidente de la República. ¡Y eso lo saben sus enemigos dentro y fuera del PRD!

Y saben, de ahí el miedo, que Hipólito puede recuperarse y volver a la Presidencia de la República, más tarde o más temprano. ¡Le tienen miedo al guapo de Gurabo!

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