Sin temor ni favor

Por Luis H. Arthur S. / El Caribe

Energías renovables V

Aun a riesgo de que me crean demasiado reiterativo, deseo dejar claro los siguientes puntos:
1) Todo país tiene recursos energéticos; 2) Estos recursos son de dos tiempos: Convencionales y no convencionales (renovables); 3) Desde la invención de la máquina de vapor hace 232 años, los convencionales han regido el mercado por su capacidad de poder almacenarse, venderse y transportarse, para lo que se han creado carteles que le han hecho mucho daño al mundo, controlando el suministro y especulando con los precios.

Son energías altamente contaminantes; 4) Las energías no convencionales o renovables: sol, viento, agua, mar, biomasas, etc. son energías pobremente explotadas.

Tienen la virtud que algunas son extraordinariamente abundantes y no contaminantes, por eso se les denomina energías verde y azules. Sólo las biomasas son contaminantes.

5) El gran problema que se presenta con las energías verdes y azules, es que son esporádicas, estadísticas o como yo las llamo “locas”. Se presentan cuando quieren sin que pueda haber una continuidad predecible y confiable.

En el caso de las energías del agua que depende de las lluvias y los ríos, hemos logrado dominarlas (hacerlas cuerdas) haciendo presas o embalses que guarden las aguas cuando llegan y usándolas cuando nos convenga, a un ritmo o rata predeterminado a su funcionamiento continuo o para demanda pico.

Claro, esto encarece el sistema agua-generador al tener ahora agua-presa-generador, pero el energético es gratis y aunque la inversión es mucho mayor, se amortiza pronto y economiza inmensas cantidades de divisas.

Lo mismo tenemos que hacer con el Sol y el viento, esto es, sol o viento-generador– almacenaje y uso continuo.

Yo le llamo domar la energía, hacerla cuerda, sin que tengamos que pagar los miles de millones de dólares en comprarle a ningún país energéticos convencionales, contaminantes y con vocación de acabarse.

Esos son nuestros recursos que tienen que “comprárselo” al Estado quienes quieran comercializar con ellos.

Claro, habrá oposición, imposición y entreguismo, pero tarde o temprano se impondrá, quizás cuando ya hayamos concesionado gratis nuestros recursos y tengamos que pagar en dólares o euros a empresarios nacionales o extranjeros, lo producido con nuestros energéticos.

luis@arthur.net