Ausencia en acto a Hertell es interpretada como hostil
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El presidente Leonel Fernández acaba de abrirse otro frente, ahora con los Estados Unidos, cuando aun el Gobierno no se recupera de un enfrentamiento con la Iglesia por la reacción de un cercano colaborador del mandatario frente a críticas de sacerdotes.
La ausencia del gobernante al acto oficial en que la Embajada estadounidense despidió a su enviado Hans Hertell ha sido interpretada como una clara indicación de que Fernández está disgustado frente a ciertas señales o comentarios que el diplomático habría hecho en algunos círculos y que reflejarían cierta crítica o desaprobación frente al proyecto reeleccionista.
Sólo una razón tan poderosa, porque toca los intereses políticos futuros de Fernández, habría llevado al Presidente a no asistir anoche a la recepción y preferir asistir, en cambio, a la misma hora a un acto proselitista junto al canciller Carlos Morales Troncoso y otros dirigentes del llamado Consejo Presidencial Reformista.
Si bien la ausencia de Fernández fue la más notoria en un acto al que asistió el ex presidente Hipólito Mejía, quien departió ampliamente con Hertell, también fue significativo que Morales no acudiera a la despedida oficial del embajador norteamericano, en su calidad de Canciller, ya que esto es lo que se estila cuando por alguna razón el jefe de Estado no puede corresponder a una invitación formulada por un miembro del cuerpo diplomático acreditado en el país.
En medio de las conjeturas y especulaciones suscitadas a raíz de este episodio, llamó la atención que próximo a dejar su puesto, Hertell aprovechara un escenario esencialmente social para hacer un pronunciamiento de reafirmación a la posición política de Estados Unidos frente al gobierno y el pueblo de la República Dominicana.
Fue ese el momento en que tras preguntarse, “¿qué quiere Estados Unidos para la República Dominicana?”, Hertell se respondiera a sí mismo, que “más democracia y más progreso, y por eso es que estamos trabajando, ese es el interés que tiene mi país”.
La alusión a “más democracia” ha sido interpretada como un velado reclamo de que haya la posibilidad de una alternabilidad, en lugar de reelección en el Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
La ausencia del gobernante al acto oficial en que la Embajada estadounidense despidió a su enviado Hans Hertell ha sido interpretada como una clara indicación de que Fernández está disgustado frente a ciertas señales o comentarios que el diplomático habría hecho en algunos círculos y que reflejarían cierta crítica o desaprobación frente al proyecto reeleccionista.
Sólo una razón tan poderosa, porque toca los intereses políticos futuros de Fernández, habría llevado al Presidente a no asistir anoche a la recepción y preferir asistir, en cambio, a la misma hora a un acto proselitista junto al canciller Carlos Morales Troncoso y otros dirigentes del llamado Consejo Presidencial Reformista.
Si bien la ausencia de Fernández fue la más notoria en un acto al que asistió el ex presidente Hipólito Mejía, quien departió ampliamente con Hertell, también fue significativo que Morales no acudiera a la despedida oficial del embajador norteamericano, en su calidad de Canciller, ya que esto es lo que se estila cuando por alguna razón el jefe de Estado no puede corresponder a una invitación formulada por un miembro del cuerpo diplomático acreditado en el país.
En medio de las conjeturas y especulaciones suscitadas a raíz de este episodio, llamó la atención que próximo a dejar su puesto, Hertell aprovechara un escenario esencialmente social para hacer un pronunciamiento de reafirmación a la posición política de Estados Unidos frente al gobierno y el pueblo de la República Dominicana.
Fue ese el momento en que tras preguntarse, “¿qué quiere Estados Unidos para la República Dominicana?”, Hertell se respondiera a sí mismo, que “más democracia y más progreso, y por eso es que estamos trabajando, ese es el interés que tiene mi país”.
La alusión a “más democracia” ha sido interpretada como un velado reclamo de que haya la posibilidad de una alternabilidad, en lugar de reelección en el Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Actuación independiente
Independientemente de sus motivaciones, la actitud de Fernández frente a los EE.UU fue saludada en algunos círculos, por entender que no debe intervenir en la política doméstica.
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