La columna de Miguel Guerrero

Por Miguel Guerrero / El Caribe

En medio de nuevas y duras amenazas del teniente coronel Hugo Chávez contra Estados Unidos, España, Colombia y la prensa, la oposición, los estudiantes y la jerarquía católica de su propio país, los venezolanos votarán hoy domingo en un referéndum que trazará el curso de esa nación por muchos años .

Los resultados de la histórica jornada decidirán si Venezuela recupera el terreno perdido en el campo de las libertades democráticas o si en cambio opta por conferirle poderes dictatoriales a un hombre emocionalmente inestable y peligrosamente violento.

Acusando al gobierno norteamericano de conspiración para evitar el triunfo de la reforma por él propuesta, Chávez ha advertido a Washington que mañana mismo suspendería los suministros de petróleo a esa nación. Estados Unidos es el principal, comprador de crudo venezolano.

Chávez no les ha dicho a los venezolanos qué haría con el millón y medio de barriles diarios que envía a Estados Unidos si cumpliera su amenaza.

A España le exige que el rey Juan Carlos se disculpe por haberlo mandado a callar, cosa que hubiera podido haberle reclamado en persona durante la Cumbre Iberoamericana, con la amenaza de nacionalizar la banca y otras millonarias inversiones españolas en Venezuela.

A su vecino Colombia le ha castigado con un congelamiento de las relaciones, poniendo en jaque un intercambio bilateral de más de 7,000 millones, lo cual tiene a los empresarios colombianos temerosos de una quiebra, y a sus compatriotas bajo amenaza de un desabastecimiento que ya comienza a sentirse con rigor.

A los medios de su país les ha recordado que corren el riesgo de cierre, como ya hiciera con RCTV, si adelantan resultados y a la oposición y la iglesia les amenaza con echarles el ejército y las bandas bolivarianas armadas hasta los dientes.

Venezuela se juega hoy su futuro y con él el curso de la política en todo el continente.

Miguel Guerrero es escritor y periodista
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