La columna de Miguel Guerrero

Servicios Google/Por Miguel Guerrero / El Caribe, Matutino Dominicano
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En su consistente afán de ocupar espacios en la prensa, el secretario de Hacienda, Vicente Bengoa, nos ha regalado la última y probablemente más valiosa joya de la imprudencia oficial.

En la vecindad del paso de un huracán, este señor le ha dicho a un país asfixiado por los impuestos y sacudido por el excesivo gasto público, que el Gobierno no dispone de recursos para enfrentar los daños que pudieran ocurrir si el fenómeno nos abate.

El ministro, así prefieren llamarse en sus ambientes, merece un reconocimiento, pero de la oposición. El es el rey de los “cachazudos”.

Atreverse a esta barbaridad en momentos en que el propio Gobierno confiesa un aumento sin precedentes en las recaudaciones, que se gastan decenas de no se sabe cuantos millones de pesos en un metro dentro del más estricto y absoluto hermetismo presupuestario, en que se destinan decenas de miles de millones en publicidad promocional de la figura presidencial y en otras tantas cosas que el país no necesita, es un descaro, una burla innecesaria a la pobreza del pueblo dominicano.

Decirle a una nación, atemorizada por la posibilidad de que un huracán profundice sus precariedades, que una administración sin límites en el gasto, no tiene recursos para emergencias nacionales, es una agresión al buen sentido y a la prudencia.

En el caso de una tragedia nacional como la que supondría el paso de un ciclón devastador, la obligación elemental de un gobierno, aún en el caso extremo de que esté escaso de fondos, es paralizar cuanto no sea prioritario por el tiempo que sea necesario, aún se trate de un metro, para auxiliar a la población necesitada y restablecer el ritmo de actividad de la economía.

Que no vengan los Bengoas con el truco ese de que no hay dinero, porque sí lo ha habido y lo hay para los lujosos sueldos y pensiones que ellos mismos se han auto-asignados. No le vengan al país con ese cuento, ¡ Basta ya!

Miguel Guerrero es escritor y periodista
mguerrero@mgpr.com.do