Servicios Google/ListínDiario, Matutino Dominicano
.
por Salim Ibarra -
El término gabinete en un sentido institucional es el conjunto de secretarios y directores generales (incluyendo al presidente de la República) que componen el poder ejecutivo de un Estado; lo que en muchos países se denomina consejo de ministros.
El Partido de la Liberación Dominicana recientemente presentó al equipo de dirección de la campaña reelecionista del presidente y candidato Leonel Fernández, resultando una copia casi exacta de las personas que están al frente de las entidades gubernamentales del país. Ante esta situación resulta difícil pensar que estos funcionarios públicos con miras de realizar y optimizar sus labores proselitistas en las demarcaciones que les fueron asignadas se abstengan de utilizar los medios que le pudiese brindar su función dentro del gobierno en beneficio de sus propósitos electorales y más aun cuando hace poco en la contienda interna del PLD, el entonces precandidato presidencial Danilo Medina denunció públicamente de que el Estado se había impuesto.
También esta realidad representa una confusión en las mentes de la población, pues no se sabe cuando actúan como funcionarios y en que momento están ejerciendo su calidad de dirigente político en campaña. La doble condición de dirigir una institución y tener una responsabilidad político-electoral hace que una persona descuide su trabajo prioritario de funcionario, que tiene como misión servirle al pueblo para servirle a la patria y por ende desvíe sus esfuerzos hacía una tarea que responde a intereses de grupo, que en nada beneficia al buen desempeño del aparato gubernamental.
El intento de materializar la reelección presidencial en países en eterna vía de desarrollo como la República Dominicana genera este tipo de problema al sistema democrático, en el sentido de que el partido de gobierno designe un Gabinete Electoral que desde su misma conformación resulta un hecho contrario a la ética y de acuerdo al proceso histórico del país generalmente sus miembros terminan por incurrir en violaciones a las leyes con la esperanza de lograr sus objetivos, pero la misma crónica del pasado demuestra el daño institucional que ha representado el propósito reeleccionista y que para lograr mantenerse en el poder se necesita mucho más que recursos, porque cuando se ha respetado la voluntad popular representada a través de las urnas el continuismo presidencial ha sido rechazado.
viernes, septiembre 14, 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario