-RAMON ANTONIO VERAS
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Las fuerzas políticas, económicas y sociales retardatarias, a nivel nacional e internacional, siempre cuentan con aliados incondicionales que les sirven de sostén en sus planes de acción contra los pueblos que luchan por su real y verdadera independencia y soberanía plena. Las distintas administraciones norteamericanas, en su interés de mantener sojuzgados a los países latinoamericanos y caribeños muchas veces se apoyan en politiqueros que siempre están dispuestos a colaborar con las peores causas.
Hace unos días, dos cuadros políticos de la reacción internacional manifestaron su sentir político e ideológico así como su identificación con los grupos dominantes del imperio. El presidente de Costa Rica, Oscar Arias, y el ex presidente de España José María Aznar, por separado, han hecho declaraciones que los retratan de cuerpo entero como lo que son: dos politiqueros que responden a los sectores, clases y capas sociales más negativos de la política internacional.
El presidente Oscar Arias, en forma irresponsable, comparó al Comandante Fidel Castro con el finado dictador fascista chileno Augusto Pinochet. De igual manera hizo referencia a la coyuntura actual que vive América Latina, donde, según él, "existe una manada de irresponsables, demagogos y charlatanes que juegan con las aspiraciones de la gente"
El presidente Arias saca de su garganta las mismas palabras que utiliza la administración norteamericana para referirse a Fidel Castro, quien constituye un símbolo en la lucha de los pueblos del mundo por su libertad e independencia.
El presidente de Costa Rica, dentro de los marcos de su concepción ideológica, no ve bien que los pueblos de América Latina y el Caribe estén despertando escogiendo a dirigentes políticos decentes para que estén al frente de sus respectivos gobiernos. La escogencia de Hugo Chávez en Venezuela, Lula en Brasil, Vásquez en Uruguay, Ortega en Nicaragua, Correa, en Ecuador y Evo Morales en Bolivia, no ha sido del agrado del presidente de Estados Unidos George W. Bush ni de Oscar Arias.
Al igual que Oscar Arias, el ex presidente de España José María Aznar está preocupado por el avance democrático en América Latina. Para Aznar, es preocupante que en nuestro continente los gobiernos de corte socialista están ganando terreno. En su reciente visita al país Aznar dijo que "está complicado el vecindario".
La miopía política, su identificación con los intereses más retardatarios a nivel mundial, llevan a José María Aznar a preocuparse por el despertar de los pueblos latinoamericanos y caribeños.
No hay que hacer mucho esfuerzo para comprender que Oscar Arias y José María Aznar tienen total coincidencia con el pensamiento político e ideológico del presidente Bush, y de ahí que los tres piensen igual con relación a Fidel Castro y los gobiernos surgidos de procesos democráticos en América Latina y el Caribe.
Por más que Oscar Arias quiera confundir con su comparación entre Fidel y Pinochet, no va a lograr su objetivo.
Fidel está por encima de las opiniones y calificativos de aquellos que por más que se empeñen no llegan a la mitad de la persona y estatura política de quien ha sido el más grande líder político del siglo veinte y lo que va del veintiuno, Fidel Castro.
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